Ayuntamiento Viejo de Zamora: Historia y Características

En el corazón de Zamora, en la emblemática Plaza Mayor, se erige un tesoro histórico que ha sido testigo de los avatares de la ciudad a lo largo de los siglos: el Ayuntamiento Viejo de Zamora. Este edificio porticado, con su fachada plateresca, es mucho más que una simple construcción; es un vestigio del pasado que encierra historias fascinantes y una riqueza arquitectónica que lo convierte en un destino imperdible para quienes visitan la ciudad.

Historia del Ayuntamiento Viejo de Zamora

Orígenes y Construcción

La historia del Ayuntamiento Viejo se remonta al siglo XV, cuando las Leyes de Toledo, promulgadas por los Reyes Católicos, instaron a las ciudades y villas de Castilla a establecer casas consistoriales. Inicialmente, el ayuntamiento se encontraba cerca de la Iglesia de San Martín, pero la necesidad de un edificio más amplio llevó a la elección de su ubicación actual en la Plaza Mayor. Las obras comenzaron en 1484 y concluyeron en 1493, dando lugar al edificio original.

Devastadores Incendios y Ampliaciones

El Ayuntamiento Viejo no ha estado exento de adversidades a lo largo de su existencia. En 1523, un incendio voraz arrasó parte del edificio, destruyendo valiosos archivos y patrimonio histórico. En 1603, debido a su tamaño insuficiente, se decidió ampliar el edificio para albergar reuniones y almacenar armas de la ciudad. Sin embargo, la transformación más significativa tuvo lugar entre 1622 y 1637, cuando se llevó a cabo una remodelación completa, añadiendo dos torres que posteriormente fueron desmanteladas en 1875.

Incidencias y Restauraciones

A lo largo de su historia, el Ayuntamiento Viejo también sufrió otros infortunios, como el incendio causado por un rayo en 1720, el impacto del terremoto de Lisboa en 1755 y el colapso del muro que daba a la calle Alcazaba debido a lluvias torrenciales en 1799. Sin embargo, en abril de 1977, se llevaron a cabo extensas obras de restauración que devolvieron su esplendor al edificio.

Características Arquitectónicas

El Ayuntamiento Viejo de Zamora es un ejemplo destacado del estilo arquitectónico plateresco español. Su fachada porticada se erige majestuosa en la Plaza Mayor y está construida con piedra de Peñausende. El corredor inferior, sostenido por tres columnas sobre un zócalo, presenta arcos de medio punto, mientras que los del balcón superior están adornados con arcos carpaneles platerescos. Los escudos de España y de Zamora decoran las enjutas de los arcos, recordando la importancia de la ciudad en la historia de España.

Aunque su nombre puede llevar a equívocos, el Ayuntamiento Viejo no fue el primer ayuntamiento de Zamora, sino que se erigió para reemplazar un edificio anterior que resultaba demasiado pequeño para las necesidades de la ciudad. Actualmente, el edificio alberga las dependencias de la Policía Municipal, lo que añade otro capítulo a su rica historia.

Un Paseo por la Historia de Zamora

El Ayuntamiento Viejo de Zamora es mucho más que un edificio histórico; es un testimonio viviente de la evolución de la ciudad a lo largo de los siglos. Sus muros han sido testigos de incendios, remodelaciones y momentos clave en la vida de Zamora. Hoy, el edificio sigue siendo un hito arquitectónico y un lugar de referencia en la ciudad, donde las huellas del pasado se entrelazan con el presente.

Si te encuentras en Zamora, no dudes en visitar este monumento y descubrir por ti mismo la rica historia y belleza arquitectónica del Ayuntamiento Viejo. Un viaje al pasado que te transportará a la esencia de esta ciudad castellana llena de encanto y tradición.

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